Capilares de alúmina DEGUSSIT AL23

Los capilares o bifilares de alúmina se utilizan en pirometría y, en particular, para la fabricación de termopares. La alúmina posee propiedades de aislamiento eléctrico ideales para este tipo de aplicaciones. Otras propiedades, como la resistencia a altas temperaturas (hasta 1950°C), una buena conductividad térmica y una excelente resistencia al desgaste y a la corrosión, la convierten en el material preferido para aplicaciones de alto rendimiento. Ofrecemos capilares de forma redonda y ovalada, con 2, 4, 6 u 8 orificios fabricados con alúmina Kyocera DEGUSSIT AL23.

¿Qué es un capilar cerámico?

Un capilar es una cerámica extruida en forma de tubos multicanal o bifilares. Se trata de un tubo cerámico con varios orificios o canales. Puede tener 2, 4, 6 u 8 orificios (o incluso más para algunas aplicaciones). Es ideal para aislar diferentes cables eléctricos no sólo de entornos corrosivos, de alta temperatura u otros entornos externos, sino también para aislar eléctricamente estos diferentes cables entre sí. Sustituye el uso de varios tubos por uno solo, con el consiguiente ahorro de espacio. 

¿Por qué elegir la alúmina para fabricar capilares? 

La alúmina es una cerámica técnica con numerosas propiedades térmicas, eléctricas, mecánicas y químicas. Es un excelente aislante eléctrico a altas temperaturas: su conductividad eléctrica es tan baja como la de un material plástico. Pero, a diferencia del plástico, es resistente a las altas temperaturas (hasta 1950°C para el 99,7% de alúmina pura DEGUSSIT AL23). Materiales como el óxido de circonio son aislantes de la electricidad, pero sólo a bajas temperaturas (su conductividad eléctrica aumenta con el calor), mientras que la temperatura no influye en las prestaciones de aislamiento eléctrico de la alúmina. El óxido de aluminio también es un buen conductor térmico. Esta combinación de propiedades lo hace ideal para la protección de termopares. De hecho, la alúmina puede impedir que fluya corriente entre los distintos hilos del sensor de temperatura y puede protegerlo de una atmósfera a alta temperatura. La conductividad térmica del material garantiza que las mediciones serán precisas y rápidas: la protección no interfiere ni distorsiona el resultado. 

Además, el óxido de aluminio ofrece muy buena resistencia al desgaste, la corrosión y la abrasión mecánica. Esto garantiza una larga vida útil de nuestros capilares y otros productos de alúmina. Es químicamente inerte y tiene una gran estabilidad dimensional incluso a temperaturas muy altas. Por último, la alúmina también es resistente al choque térmico.

¿Qué tipos de capilares vendemos? 

Nuestros productos estándar incluyen capilares multicanal redondos fabricados con alúmina Kyocera DEGUSSIT AL23. Pueden tener 2, 4, 6 u 8 orificios. Su diámetro exterior varía entre 0,9 mm y 8,5 mm. Su longitud máxima se fija en función del diámetro en 400, 800 o 1200 mm, o incluso más en fabricación especial.  

También ofrecemos capilares ovalados. La anchura del corte varía entre 1,55 mm y 4,2 mm, la altura puede oscilar entre 0,9 y 2,2 mm y la longitud máxima se fija en 400 mm, o incluso más en fabricación especial. 

Encontrará estos dos productos en el catálogo de productos estándar  

También ofrecemos capilares de dimensiones normalizadas para termopares. Están fabricados en DEGUSSIT AL23, su diámetro exterior varía de 4 a 8,5 mm y su longitud máxima está fijada en 2060 mm.  

Puede encontrar estos capilares normalizados en el catálogo y consultar esta tabla para determinar las dimensiones adecuadas de las vainas y los capilares para la protección de un termopar.

¿Para qué aplicaciones puede utilizarse un capilar?

Los capilares cerámicos pueden utilizarse para aislar hilos y cables en aplicaciones de alta temperatura en la industria del vidrio y hornos industriales, por ejemplo. Se utilizan especialmente en pirometría para la protección de dispositivos de medición de temperatura. En concreto, se utilizan para la protección y el aislamiento de sensores de temperatura. 

Los termopares constan de dos hilos (platino y platino-rodio) y miden la temperatura por el efecto Seebeck. Las vainas se utilizan para aislar eléctricamente la soldadura de los dos hilos del termopar del exterior y también para proteger la varilla de temperatura de un entorno corrosivo o abrasivo. El capilar se utiliza para aislar los dos hilos entre sí en toda su longitud.